Una nueva pieza ha desembarcado en la familia de la lujosa marca relojera: el magnífico 1966 con una caja de 42 milímetros. Este modelo discreto y clásico, estrena una nueva esfera para la óptima legibilidad y propone una fecha a las 6h para mantenerse fiel a la elegancia clásica y atemporal de la colección.
La colección Girard-Perregaux 1966 es uno de los íconos de la marca, por su carácter, elegancia y por concentrar toda la historia, técnica y estética de la marca. Con este nuevo cronógrafo se buscó un dominio de la funcionalidad y del estilo.
La caja de 42 milímetros aumentó su tamaño pero no perdió sus líneas. Está hecho en oro rosa, la esfera es de opalina plateada y la disposición de sus agujas permiten una muy buena lectura de la hora. El Girard-Perregaux 1966 de 42 mm cuenta con una reserva de marcha de más de 46 horas, tiene su fondo de cristal de zafiro, cuenta con 57 rubíes, mientras que su correa es de alligator.